martes, diciembre 27, 2011

Vísceras

Me despertó un dolor profundo en las patas, instintivamente las lamí… la sangre era y no era mía…

Intente divisar a través del humo, por si estaba cerca… “mi visión esta cada día mas nefasta” - pensé, mi nariz, siempre sabia, me hizo saber que no había humo y camine unos cuantos metros a través de la niebla, sin todavía poder entender lo que pasaba.

Me recosté debajo de un árbol, el frio era penetrante pero la búsqueda calentaba mi interior, mi barba huele a ella, mi cuello también, perseguí este olor con sutileza al principio, pero su carne y sus vísceras me hicieron correr.

Descolocado aun… fui a la cima de un risco, mis patas dejaban un sendero de sangre, por si se decidía a seguirme, aullé lo mas fuerte posible, pero solo aullidos omniscientes vinieron de vuelta, lejanos, pero como un calmante letal.

El mareo llego, no había comido en días, vague por la nieve, soñé con el sol, soñé con su luz, que se alejaba, oculta en mis pesadillas, intocable como el ciego que solo es ciego por los parches que pone sobre sus ojos.

Desperté asustado, con sangre en mis patas… que era y no era mía…

Ya entregado al limbo, solo quedaba cerrar los ojos, vagar en su voz, en su mirada boreal, en sus aullidos dulces en mi oído, los abrazos y cariños felinos, querer su paladar color miel, lamí su olor en mis patas, su olor amargo y profundo, complemento perfecto al dulce mío.

Mire la nieve, cada vez mas roja, ya no son solo las patas las que sangran, no queda fuerza para aullidos, el abismo hace ecos, de respuestas inconexas, de mis latidos en círculos, de anhelos punzantes y cariños lacerantes.

No veo la guarida, pero huelo las vísceras.

lunes, diciembre 12, 2011

Tanguito


Es la tensa calma

La dulce espera

Los labios rotos

El cáliz desconocido

La saliva veneno

La mano torpe

La mano experta

Un rasguño agudo

El musguito apoderándose del tronco


Es así cómo la herida que crece en su interior

Se expande a un ritmo angustiante

Bajo el régimen del latido cansador

De un nuevo sabor inquietante


Son sus viseras, que mordería sin pudor

Sus versos, que llevaría a todos mis sueños

Su mejilla dulce, su nariz que sin querer se queda con algo de mi

Su mirada nueva, para ella, para mí, para sus fantasmas

Su cuello, ay su cuello… lo rozaría hasta sacarle miel


Y su olor estaba, no a flor de piel

Sino que por debajo de ella

Mis manos aun huelen su voz

Y el Tanguito es lo que quiero hoy

lunes, noviembre 28, 2011

¿Y qué importa?


¿Y qué importa si ella no tiene olor?, le dije indignado al ángel verde que me acompaño camino a casa, si es su sabor amargo el que produce un efecto adormecedor y hace vibrar hasta el paladar de un muerto.

Es la brisa fría de la soledad, tocando sin tocar, adornando el momento nervioso, el instante preciso, el anhelo y el tierno deseo de hacer ese momento eterno, ¿y que importa si la noche es fría y solitaria?, si la saliva es la que enciende el alma y todo lo demás.

¿Y qué importa si ella no entiende nada?, si su sonrisa revelo que el rumbo es lo que menos importa, si sus labios al cuello crearon un nuevo lugar, una guarida tranquila y suave, si el diente al labio fue como anzuelo a la boca.

Y el ángel verde se sentó al lado mío; me cedió una sonrisa y me pregunto: “por lo que dices y por tu olor a morado… asumo que quieres que vuele hacia donde ella y la abrace como la abrazarías tu, por debajo de la piel y hasta que la luz golpee su rostro”, le sonreí de vuelta.

Y yo se que tiene olores, es solo que no le gusta compartirlos, también se que el sabor lucido de su bemba es mi desvelo, su voz indecisa pero firme, raro y denso cariño es el que ha llegado a rozar mi nariz, hoy solo sueño que espere como yo la espero.

jueves, noviembre 24, 2011

Esto no es un poema


Es peligroso, resbalar con tu llanto y quedar inconsciente, en un viaje sin sentido y sin sonido.

Es de ansioso, ver mis delfines nadando en el mar que creaste con tu llanto.

Es de soñador, que el viento de tus suspiros me haya llevado tan alto.

Es de inepto, no saber qué hacer con tus manos un día de sol.

Es peligroso, subir los muros creados por un montón de rocas inmaduras.

Es de iluso, escribir palabras imaginarias con tu saliva.

Es de papiche, intentar convertir tu mirada en alas.

Es de romántico, no poder transformar las noticias duras en un dulce de anís.


lunes, noviembre 21, 2011

Los 5 mandamientos


1- Tranquilidad ante todo.

2- Sensualidad ante todo.

3- Sinceridad ante todo.

4- Adaptabilidad ante todo.

5- Anti-poesía ante todo.


jueves, noviembre 10, 2011

Epitafios

1- El Kitapena.

2- Siempre que mencionaba su nombre ponía cara papiche.

3- No me arrepiento de nada.

4- ¡Eso es lo que teni!

5- 5-6.

6- Siempre anduvo pichicatiado.

7- Ta todo fumado mi cabo

8- Pe Pe Re Re Pe Re Pe Pe

9- El Malavida

10- Puras mentiras

11- ¡Métele mano!

12- …io la lavo lei, lei me lava a me...

13- Era Acaballadamente Acaballado.

14- Siempre lo supo.

15- Le cargaba que le dijeran pava.

16- Amó, lloró y besó.

17- Nunca le creyeron.

18- El que a hierro mata, a hierro termina.

19- Volantín cortao, no tiene dueño.

20- Nerd.

21- El Mai Niga .

22- Se fue pal norte.

23- ¿Pa donde me lleva mi cabo?

24- Mama, voy con los hippies al rio y vuelvo.

25- Yo la quería.

26- No le crea

27- El manos de empanada.

28- En un beso va el alma.

29- Tranquilo niño.

30- Estornudó y eructó al mismo tiempo.

31- Puta que era puta pa sus weas.

32- En realidad a quien querían liquidar era a su gemelo.

33- Cariñito > Caprichito

34- Why Not?

35- Puras patrañas.

36- Murió perjudicao’.

37- El cuneteado lo mato.

38- Entre sus papeles no encontraron nada.

39- Siempre creyó en la línea curva.

40- Negrito Bembón.

41- Lo pasearon.

42- C'est la vie.

43- Luuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuusho.

44- Murió ahogada en su propio llanto.

45- Carrrne Diem.

46- Epitafios.

47- Se las pololeo a todas.

48- Hijo: las mujeres y el pollo se agarran con la mano.

49- ARR...

50- El camino es culebrero.

martes, octubre 18, 2011

El ruido de los zapatitos de chamán

Ruido qué me has hecho, ruido yo no he sido, ruido insatisfecho... ruido a que has venido...

Es difícil contar esta historia, para empezar, tienen que imaginarse su rostro, deben saber que ella tenía los dos ojos al mismo lado de la cara, era tanta la costumbre, era siempre el mismo norte, su brújula no latía en otra dirección de hace un buen tiempo, siempre miraba hacia el mismo lado.

Entonces, ¿Qué hacer?, si a pesar de esta deformidad me parecía su rostro hipnótico y desarrolle conductas plumíferas cada vez que la veía, es el corazón de pollo que me latía como el bombo ese de Keith Moon, era la cara de pavo que se me salía una y otra vez, con colores cada vez más fuertes.

Entonces, ¿Qué oler?, si alguito huele cada vez mejor, es como que la primavera le entrega condimentos a la puerta y los mezclara sin saber cocinar, sin saber siquiera mirar en varias direcciones, buscando el rumbo perdido, vagando por ahí, poniéndose los zapatitos antes que los calcetines.

Porque tal como el chamán, le encanta vagar en círculos, cerca del fuego, al ritmo de brebajes que dejan inconsciente, dando señales de humo legibles pero lejanas, entonces, ¿Qué escuchar?, ¿Qué sostener?, ¿Qué seguir?.

Solo puedo mirar la sonrisa sincera que vale la pena, la sonrisa en los ojos a pesar que veo borroso y bailar al ritmo de los zapatitos de chamán.

miércoles, octubre 12, 2011

La huida


No les voy a mentir, a mi me dijeron que tuviese cuidado, que alguien cerraría los ojos y saldría disparado, lo que no sabía, eran los disparates…que bueno, escuche tranquilo.

No es que sea fan del sodio, pero sus lágrimas me parecieron un condimento inevitable, un paso más en esta historia sin guion.

Ahora, la verdad es que no escuche tan tranquilo, ¿ya les dije que no iba a mentir?, bueno, es que después de todo, fue complicado seguir las huellas.

El llanto la hacía más resbaladiza y dispersa, a la vez, el rastro desaparecía, pregunte si la habían visto pasar, pero mi sonrisa solo trajo lo mismo de vuelta.

Busque su olor, pero divague entre un montón de recuerdos color Calipso, dentro el caleidoscopio no podía concentrarme.

A mí me dijeron, que alguien huiría, no sabía que sería de tal forma, pero al menos ahora se que quien correría, no era yo.

Me quedo aquí, escuchando ríos de llanto, caminando acompañado y sin rumbo.

martes, septiembre 27, 2011

La Prima


La prima va llegando

La prima ve borroso

La prima viene llorando

La prima vota la pena

La prima vuelve


La prima Van

La prima Vero

La prima Viole

La prima Vos

La prima Vuelantin


La prima vacila

La prima vende

La prima vive

La prima voodoo

La prima vuela


La prima vagina

La prima verga

La prima vida

La prima vomita

La prima vulva


La prima va llegando

La prima ve clarito

La prima vi ayer

La prima voraz

La prima vuelve


La prima ve

La prima verá

La primavera

sábado, septiembre 10, 2011

Falta "alguita"

¿te ayudo?

- Hola, le doy un BMW a cambio de ese Chocapic

- ¿Y a que se debe semejante oferta?

- Yo tengo hambre señor, nada más

- Nada más, nada menos, bueno, tengo un flan

- ¿Si?

- Perdón, un plan

- ¿Un plan de caramelo?

- No no, ¡un pan!... con mortadela

- Aahhh… pero que plan mas irrealizable

- Bueno, si no es lo que necesita, le daré con el encargado de flanificación­ y reestructuración del corazón­­

- Es que ya no quiero más burocracia señor, me tiene el alma media torcida

- Ojala tenga un ratito para Ud., es un especialista

- Ud. Dele no más

- Mire, yo sin ser un experto, le digo no mas, a la distancia se le nota el hambre,

Y el loco afán de comerse la cara de ese hombre con más de mil expresiones

Pero… pase por acá, no es necesario que saque numero, total, es como de la familia y entre mafiosos no hay problemas, eso sí, ¿trajo el puro que le pedí? No, no, es solo una broma

- Pero ve… usted ha vuelto mi flan irrealizable

- Es que el puro ese, no se prende con el fuego ese, es mas, Ud. Lo ha prendido con su mirada,

Perdida y borracha, sedienta y hambrienta

Debe irse a la cima del cerro mas cercano, desdoblarse y ser una calle­,

Y ver si en el horizonte siguen siendo paralelos­­

O si Ud. de ese flan tiene el caramelo­­

- Pero yo solo vine por más Chocapic

- No me venga con patrañas, Ud. Viene con adornos

- Así es, vengo con muchos aliños, para darle sabor a los sin sabores, aliños de todos colores, un circo condimentado, sal para los diabéticos, sal para los hipertensos y alguito de azúcar pa los que no bailan merengue

- Es sal para la herida, para que se saboree y se dé cuenta que con aguardiente no basta­,­ que el licor­, no es tan rico­, pero embriaga igual­, le hace confundir dulce y amargo­, ya que le tuerce y aturde la lengua­.­

jueves, agosto 25, 2011

Hola, buenas tardes, ¿aquí vive el Jesús?

Iba yo tranquilo, caminando por el querido Renguito, me metí por una de estas calles ocultas, una que es como un callejón, Guanguali creo que se llama, una que esta paralela a esta… mmm…¿cómo se llama?... Guanguali creo, no se la verdad, el punto es que iba por ahí, cuando me encontré con la “Casa de Dios”, yo venía los últimos días haciéndome preguntas existenciales, como:

- ¿Que sueñan los perros?

- ¿De dónde vienen las legañas?

- ¿Cuando uno empieza a ser persona?

- ¿Como a través del habla construimos la realidad y como nos desadaptamos sistemáticamente si dejamos de ocuparlo?

Cosas de ese estilo, entonces me acorde que cuando era chico, mis abuelos me hablaban de ese libro de ciencia ficción llamado Biblia y del evangelio de Yisus Craist, que el todo lo curaba y todo lo sabía, por lo tanto, era el personaje indicado para responder mis preguntas, eso sí, mis abuelos se indignaban con mis preguntas y no entendían mi percepción de lo que pasaba dentro del “Templo de Dios”, yo escuchaba zapateos dentro de ese lugar y le decía a mi abuelo: “¿dan cursos de cueca allá adentro?”, o le preguntaba si era un teatro donde los niños hacían sus obras, cosas como: “¡toma esta espada y este escudo y vence el pecado!” me hacían pensar esto, en fin, llegue a la iglesia y al lado había una casita, donde supuse, vivía Jesús:

- Alo! Alo!

Una señora de edad salió y me atendió:

- ¿Si joven? - me dijo

- Hola, buenas tardes, ¿aquí vive el Jesús? – pregunte

- Si, aquí vive, pero anda en el supermercado, comprando el pan, ¿quiere dejarle un recado? – me contesto la dulce señora

- mmm… dígale que vengo mañana, que necesito hablar un rato con él, adiós.

Así, un poco decepcionado, me fui a mi casa, pero volví al otro día, lleno de esperanza, pase por el cacerolazo en la plaza de Rengo y partí:

- Hola, ¿cómo le va?, yo vine ayer, ¿se acuerda de mí?

- Si mijito, Ud. andaba buscando al Jecho, pero sabe que fue a una marcha y aun no vuelve, pero déjeme llamarlo, vengo al tiro

Al minuto volvió la amorosa señora:

- Sabe que se encontró con unos amigos y dijo que iban a tomarse unas Pilsen y volvía…

- Chuta, ya, vendré mañana temprano entonces, que este bien.

Al otro día, fui a la hora de almuerzo en busca del Jesús, pensé que a esa hora lo podía encontrar tomando vino y multiplicando cosas para el almuerzo, además, es una ley principal de la vida que “la tercera es la vencida”, fui de nuevo, lleno de optimismo, con una sonrisa de oreja a oreja:

- Hola, ¿Qué tal?

- Hola mijito, pucha, sabe que, de nuevo no está el Jecho, se levanto temprano hoy y fue a jugar al trompo con sus discípulos, que como se viene el 18 y el año pasado gano el Championship de Trompo, debe prepararse bien para defender el título, ademas, todos dicen que fue un "milagro" que haya ganado y el quiere demostrar lo contrario.

- Bueno, me rindo, dígale que vine.

Así que... pucha, que les puedo decir, busque a Jesús y no estaba disponible, la culpa no es mía.

miércoles, agosto 10, 2011

¿Qué tomas lunita y porqué estas tan amarilla?


Iba yo cayendo a toda velocidad

iba yo sin pena ni risa

caí sobre nubes con formas de elefantes

me agarre del hilo de un Volantín colorado

que sostenía un ángel que miraba el arrebol


Inconsciente soñé con las caras de siempre

las canciones repetidas creaban el mismo ambiente

cuando desperté, en la esquina de mi cama estaba…

resplandeciendo, sin alegría, sin tristeza

sin un cigarro en la mano como la noche anterior

claro, no era ella


Nunca vi su rostro con claridad, ¿era joven, era mayor?

solo sé que su voz sabia a alcohol

y que sus ojos miraban mi interior

me explico que quería volver

que tenía un plan y yo lo arruine

“no era mi intención” – me disculpe sonrojado


Vivía más arriba de todo...

hasta que se durmió sobre colores maravillosos

y despertó en la verde y húmeda tierra

“llevo años intentando volver” – me dijo

“pensé en el plan maestro, en elevar el Volantín más bello,

para que así me vieran y volvieran por mi”


No hay consuelo tras una confesión así,

solo pude ofrecerle ayuda

a veces despierto en medio de la noche

y sonríe a los pies de mi cama

le ofrecí ayudarle en su viejo plan,

y seguimos buscando sobre las nubes…

miércoles, julio 27, 2011

¡Mijo!, abróchese los cordones (Epitafio 4)


Lo que pasa es que cuando uno entra al palacio de los recuerdos se encuentra con cosas muy extrañas, no hay lugares ni edades, los nombres se confunden y somos como niños borrachos, dueños de la sinceridad.

Empiezas a rendirte a los besos y suspiros favoritos, ya que bueno, es algo inevitable, puedes resistir enfermedades, desastres naturales, colapsos… pero estas cosas superan todo y te tocan por debajo de la piel.

Viajas seguido, con distintas personas, bajo distintos efectos, pruebas nuevas comidas, respiras a distintas velocidades, hablas más bajito, despiertas más temprano, sueñas más profundamente, pero básicamente, el universo te deja donde mismo.

Luego despiertas en un sofá desconocido, con sonidos que no son familiares y te das cuenta de que la trompa de un elefante es muy distinta si la miras por debajo, es casi como haber estado leyendo un capitulo de Papelucho dentro de un libro de Dostoievski o viceversa… o no lo sé, esto no tiene nada que ver con cordones desabrochados…

viernes, junio 03, 2011

Rainy Day (Dream Away)


Bueno, este es el problema: llevo viajando por varios colores y a través de distintos sonidos, durante varias vidas, he bailado en una galaxia lejana con gatos piratas que me gritaron: “arrrrivederci”, “arrrrangiarsi” y otras cosas (lástima que no invite a alguna especialista en Gatones), el tiempo transcurre muy rápido, más cuando se va sin rumbo y se toma once en el limbo todos los Martes, con mi amigo africano-japonés.

24 días al futuro conseguí una capa color morado y de nombre Violeta, al instante me la puse en el cuello, por instinto, como si tuviese frio (quizás porque llevo semanas con fiebre en el ayer), pero el morado irrito mi cuello, poniéndome violeta e hinchando la piel, luego los brazos, el torso y así al resto del cuerpo.

Como un globo gigante, cuyo combustible es de color verde flúor, he mirado desde arriba los campos, me instale en la cima de un árbol, que me pareció conocido (como esos árboles que me gusta mirar desde el bus), me pregunte hacia donde iba, si al ayer o al mañana, una nube morena de frente e iluminada por arriba se hizo ave y me hablo al oído.

El sonido era tan bello que las palabras no tenían sentido, podía tocar pero no sentir, sostuvo a Violeta y me hizo pararme sobre ella, para ir con calma, siguiendo su voz por naranjos abrigadores y durmiendo bajo azules tranquilos.

He despertado donde siempre, mirando al mismo gato por mi ventana, solo para darme cuenta que el me ve por debajo de la piel, sabiamente, como pidiéndome que entregue lo que no quiero entregar.